martes, 25 de enero de 2011

***Cajita de Musica ***

***Cajita de Música***


(Primer Movimiento)

Como dulce sin envoltorio,
como ángel sin alas…
Así te vi dándole cuerda,
una y otra vez a aquella
cajita de música…

Tus manos traviesas detenían
de vez en vez el girar de la muñequita,
entonces te parabas a bailar.

Girando y girando tus encantos
se iban desatando…
Provocando un cosquilleo en todo
mi ser.

Si hacía apenas unas cuantas primaveras
que no te veía…
Y de repente te me hiciste mujer.

Notaste mi presencia, mas la ignoraste,
viéndome, hacías como que ni me veías
y seguías bailando…

Yo te salude, pero hiciste como
que no me conocías…
Yo preferí dejarlo así.

Dos días después te vi…
Venias del colegio y nuevamente
me ignoraste, yo hice lo mismo,
seguí de largo como que no existías.

Aguantándome las ganas de voltear,
me fui con un sabor amargo en el paladar,
no podía creer que una chiquilla como tú,
no solo me ignorara, sino además dejara
mis piernas temblando…

Uno de esos días para mi desgracia
te volví a encontrar…
Esta vez besándote con alguien que
no se sabe ni peinar…

Sentí una rabia, que me hubiera gustado
ser tu padre y arrebatarte de los brazos
de aquel rufián…

Tú te diste cuenta y sonreíste con una picardía,
que me confundió…Yo quise salir corriendo,
pero ya el daño estaba hecho…
y me aleje con el corazón desecho.

Como un chiquillo me fui a la habitación,
sin querer hablar, sin querer cenar,
con una rabia reclamándole al corazón
¡En quien carajos se fue a fijar!

Dos semana después…
Iba yo con un grupo de amigos
y alguien a quien desde que conozco,
no me deja de coquetear.

Ella acariciaba mis cabellos…
Me decía cosas al oído que otros
no deben de escuchar…

Al levantar la mirada, te vi,
con el rostro bañado de lágrimas,
fue algo que no comprendí.

Despavorida saliste huyendo,
como presa herida a su guarida…
yo salí detrás de ti…

Sin lograrte alcanzar, si saber porque
un dejo de tristeza se apodero de mí,
sintiendo cólera contra el destino,
que te puso tarde en mi camino…

Me fui por allí, haciéndome mil preguntas,
en un monologo interminable donde yo
no tenía nada que decir…

Sin saberlo, tu desde tu escondite,
me mirabas alejarme mientras te
secabas las lágrimas.

Mas por esas providencias del destino,
voltio a mirar y allí estabas tú…
Con tu carita bañada en lágrimas
y con una expresión de ternura
que toco mi corazón…

Corrí hacia a ti y sin preguntarte
lo que era obvio te abrace…
Y en un beso un torrente de
ternura te entregue…


Oxwell L'bu
Foto: Internet

No hay comentarios:

Publicar un comentario