El perdón no se da
porque se merezca…
Qué difícil es pedir
... perdón…
Cuando se ha herido
el corazón de alguien
que te ama.
Que fácil puede ser
a veces pedir una disculpa
y disfrazar la indiferencia
de culpa.
Mas difícil es perdonar,
cuando un noble sentimiento
se le paga con traición…
Y sientes que tu vida ha terminado.
Pero pedir perdón de corazón,
cuando uno se ha equivocado,
eleva el espíritu…
Y darlo es la muestra más
profunda del amor.
Ya que es en la prueba donde
se forja el crisol del oro más puro
y surgiendo del fango brilla
con más intensidad un diamante.
Así como un ego elevado y un alma
arrogante no sabe pedir perdón,
un corazón rencoroso no sabe
como darlo…
Ya que el perdón solo puede darlo
o pedirlo, un alma acrecentada
por la nobleza y un corazón
eclipsado por el amor.
Oxwell L’bu Copyright ©2012
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