Mujer tu sensualidad me mata
y tu entrega es un vicio,
que me tiene al borde
del precipicio.
Tú no eres una diosa,
ni una diva esquiva,
pero tu sensualidad,
es sumamente adictiva.
Adictiva físicamente,
adictiva psicológicamente ,
adictiva por naturaleza,
veneno y antídoto es tu belleza.
Una mirada te basta,
para atraerme como iman,
un gesto te es suficiente,
para volverme demente.
Y si me rosas el efecto
es inmediato,
me voy detrás de tí,
sigiloso como un gato.
Tus besos son dosis letales,
tus caricias pócimas astrales,
que me sacan de este mundo
y te vuelves obsecion.
Hacerte el amor,
es un acto suicida,
pues si no esfas,
se me va la vida.
Es que tu sola presencia
es narcótica,
eres una mujer,
peligrosamente adictiva.
Oxwell L’bu Copyright © 2017
