Qué somos...

La noche tendió su manto, sobre la lluvia...
Y el cielo pregunta: Que somos tú y yo.
Y no hay respuesta evidente, pero si consciente,
de un sentimiento que rebalsa, el caudal
de la sangre que nos corre por las venas.

Es que somos, el amor en plenitud,
que hace de cada encuentro una virtud;
somos dos novios de manita sudada,
somos los de besitos de pescadito,
somos dos amantes que esperan la noche,
para amar sin reproche,
en esos encuentros furtivos.

***Las Palabras que se Comió el Borrador***
Hay cosas que se quieren decir,
hay sentimientos que no se sabe
como expresar…

Y allí esta uno, ensayar y ensayar,
buscando a esas palabras que se
esconden por timidez.

Tratando de atrapar una inspiración
que le es esquiva…
Se rasca uno la cabeza y la barriga.

Sin encontrar la forma de decir,
lo que realmente se quiere decir
porque no encuentra la forma.

Borra las hojas, tacha las letras
y un millón de hojas yacen en
el suelo muertas…

Entonces se empieza a envidiar
los versos de Neruda…
Las coplas de Cabral…

Da rabia escuchar con qué facilidad,
Roberto Carlos, Camilo Sesto o
José Luis Perales expresan el amor.

De una manera tan natural
con esa forma subliminal,
que deja al alma suspirando.

Uno se pregunta de cuál fumaron estos,
o cuáles son los pretextos,
que se tiene que inventar para
que el alma empiece a levitar.

Te he escrito tantas cartas
y he fallado en mis intentos,
pues hay tanto que te quiero
decir y no lo logro resumir.

Perfumo mis cartas,
para que te hablen de mi,
Pero lo mío son letras
en un infinito letargo…

Como he de hacer para
que despierten…
Que he de hacer para poder
expresar de una vez por todas
esto que se ahoga en mi pecho.

¡Ojala! Consigas descifrar
lo que quise borrar,
por este estúpido temor
de verme al descubierto.

¡Ojala! Comprendas mi amor
que lo mío no es un sentimiento
muerto.
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