lunes, 4 de mayo de 2020

Amarte...

Tú tan efervescente,
yo tan demente...
Yo tan ardiente,
tú tan consecuente
con ese sentimiento
que es nuestra felicidad,
nuestro gozo y tormento.

Tú vino exquisito para mi sed,
yo hecho justo a tu medida,
porque en esta vida,
todo gravita en torno al amor,
amor que nos sobre pasa
y rebalsa nuestro ser.

Que bella eres mujer,
que gozo encuentro con
tan solo contemplarte,
tú no te imaginas,
el supremo extasis
que es amarte.



Si fuiste luz...

Una luz en mi amanecer fue tu amor,
pero ahora ya anocheció...
La obscuridad todo lo envolvió
y aquí estoy, preguntándome yo,
a dónde se fue esa luz
y cómo es posible que desde aquí,
no me llegue, ni si reflejó.

Acaso las estrellas no están tan lejos
y aún así, le iluminan sus noches
de desvelos a una luna que bosteza,
esperando al sol...


Me he llenado los ojos de ti...

Me he llenado los ojos de ti, te he contemplado en la distancia y nace en mí esta ansia de verte frente a mí… Me he extasiado de con tu belleza aun que se que es una torpeza el no ver mas allá de lo que reviste el alma, aun así sueño con la llegada de ese día de tenerte frente a mí, de ver la pureza de tus ojos,  de escuchar tus palabras y abrigar este frio de tu ausencia con el calor de tu presencia.
Oxwell L’bu Copyright ©2013