Mujer tú no eres la manzana,
que a Adán condeno…
Ni la causa por la que el creador,
del paraíso lo desterró.
...
Tú eres el verso más bello
y sublime de Dios,
la poesía que el poeta
aun no escribió.
La canción que resuena,
con ecos inefables en el corazón
del hombre enamorado,
que en tus brazos se ha abandonado.
Mujer se ha gastado mi pluma,
inútilmente tratando de definirte,
ahora tomare de tu esencia,
me embriagare de tu presencia.
Para volver al paraíso perdido,
para alcanzar el infinito
y navegar en el océano
de tus eternidades.
Porque sin ti preciso de multas
para avanzar…
Mas contigo podría alcanzar,
hasta la más loca quimera.
Eres en mi vida perpetua primavera,
en mi existir mi razón para vivir
y si un día he de partir solo espero
tener tu mano junto a mí.
Oxwell L’bu Copyright ©2012
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