Estamos tarde...

 Realmente estamos tarde y eso lo confirma el espejo y aún que las ganas de vivir siguen intactas, quien puede borrar un pasado al que se sigue encadenado...

Ya ambos vivimos lo que teníamos que vivir y lo peor es que lo vivimos con alguien diferente de quien intuía nuestra mente y anhelaba  nuestro corazón.

Si estamos tarde y el reloj no es un cangrejo que camine hacia atrás y que nos permita recuperar los mejores años de nuestra existencia.

Hoy tenemos más pasado que futuro y si al menos lo vivido no le pusiera sancadilla  al presente, quizás te meterías de a poquito en mi mente y te alojarías en mi corazón.

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“Luz y penumbra II”

 ***Luz y Penumbra II***   

(Alas para un sueño)

Cuentan que en una noche

profunda un ángel salió a

jugar saltando de estrella

en estrella… 

Hasta que cansado se quedo 

dormido en la luna…

Y allí instalado subieron los

sueños y le quitaron las alas. 

Y desde entonces el ángel

aguarda oculto en la luna,

a que un día un mortal de tanto

sonar pierda conciencia del suelo

y los sueños regresen allí… 

Quizás tú seas ese ángel que se

bajo de la luna y un día paso

junto a mi pues te me has 

vuelto obsesión desde que te vi. 

Yo me espera sentir esto que

siento por ti…

Yo no esperaba que te clavaras

como una espada en la roca

de mi corazón… 

Hoy estoy aquí esperando 

en una esquina para verte pasar,

Para inventar cualquier pretexto

y que me des conversación. 

¡Hay! Que terco es el corazón

que se vuelve a llenar de ilusión

anulando a mi razón…

“La voz de un verso”

***La Voz De Un Verso***

Sentado en la mesa redonda,

donde no hay posición

de privilegio…

Donde no hay quien preside,

pues uno está allí para escuchar,

aun sin comprender.

Escuchar lo que solo algunos quieren

escuchar porque la arrogancia

les indica  a otros que ya lo escucharon…

Porque en este mundo es más

importante el que habla,

que el que escucha.

Y si nadie quiere escuchar,

¿Acaso habrá quien quiera

escuchar el silencio?

Ese silencio del que se nutre

el poeta…

Esos silencio que separan

las letras, las palabras…

Palabras que tiene doble filo

y que cuando penetran cortan

de tajo el pensamiento.

Para que aflore el sentimiento,

que va más allá de las palabras,

que las trasciende pero que aun así,

recurre a ellas para que lo expresen

de forma sublime.

¿Quién puede secuestrar las palabras?

Acaso existen recetas para escribir

un verso…

Acaso es un proceso mecánico

que se repite y se repite.

Para luego jugar al escondite,

con los buscan la inspiración…

Porque el verso más elocuente

es el más sencillo, ese que se 

introduce como larva en el cerebro.

Porque no encuentra inspiración

el que la exige…

Si no el que con humildad la busca,

no para servirse de ella…

Si no para ser medio.

Un verso es…

Como el arco iris que se tiende

como puente en el horizonte,

es como un beso de una doncella

en la boca que te deja enamorado.

Y esto para que quede claro,

que quien escribe,

es solo un transcriptor,

que lee los labios del

verdadero autor.

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