Si usted pudiera verse...

Si usted pudiera verse, como yo la miro, no se miraría, más bien se contemplaría y de a poco descubriría, el porqué me enamoré de usted.

Pasaría por alto, la belleza y ternura de su mirada, no se quedaría detenida en su angelical sonrisa y sentiría latir su corazón de prisa, cuando descubriera esa luz que emana de su mirada.

Si usted pudiera verse con mis ojos, descubriría el porqué de esta ternura, el porqué provoca esta excitación y el porqué de mi obsesión.

Si usted, pudiera verse desde el prisma del amor, mi amor, las explicaciones estarían de más y cuando camina no voltearía a mirar atrás, porque sabría que soy como su sombra... Ay mujer, si usted pudiera sentir, lo que siento yo, si usted pudiera ponerse por un momento en mis zapatos, comprendería el porqué me meto en sus sueños e incluso en sus memorias.  Si usted dejara de verse como se ve, se empezaría a ver y a contemplar, de la forma en que lo hago yo...
Oxwell L’bu copyrights 2020

A Ernesto Cardenal

***Ayer, murió el poeta***
(A Ernesto Cardenal)
Ayer murió el poeta…
El que mando más de una vez
a las preocupaciones a pasear
en bicicleta.

El que nunca se permitió
ser del destino marioneta,
el que siempre se revelo,
al que la vida nunca domo.

Rebelde y cautivo se hizo,
ante la vida aceptó el compromiso,
pues el siempre quiso,
ver una America unida.
antes de su partida.

Ayer murió el poeta…
Nadie lo extraño, porque
estando presente muchas
veces nadie lo noto.

¿Será? Que sustituyen
su presencia los versos
que dejo...
¿Será? Porque en realidad
nadie lo conoció, pues lo
que importaba eran sus letras.

Quien saben, quién
asistió a su funeral,
quizás solo los grillos
con sus violines dormidos
y los pájaros con sus flautas
cayadas.

Le acompaña el silencio,
llora por él la soledad
y la luna se ha cubierto
el rostro con una nube gris
y los árboles se han cubierto
con cenizas.

Las estrellas parpadean
su tristeza y en plena noche
se pinta un arco iris en el horizonte,
donde se deslizan sus últimos versos.

Ayer llego esa mujer misteriosa,
a la que siempre esquivo…
Él le pidió ver la próxima primavera,
ella solo lo miro.

Después de un largo silencio,
con un beso el último suspiro
le arrebato…

Dicen que tenía en las manos,
una pluma y un trozo de papel,
nadie sabe con certeza que era
lo que escribía.

Unos dicen que eran verso de amor,
otros que era una carta de despedida,
alguien más dice que eran versos celestiales
y por eso fue llevado el tercer cielo.

Dicen que los últimos versos los escribió,
con tinta del corazón…
Que luego la muerte los quiso incinerar,
 Para que la vida no los leyera.

El viento impetuoso el fuego apago
y una mariposa con la ayuda de un
huracán se los arrebató  y se los llevo
al jardín de las eternas primaveras.

Hoy en esos jardines florecen,
nuevos versos, nuevas poesías
y aun que nadie recuerda el
nombre del poeta.

Hay algo que nadie olvido
y es que ese amor a la vida
es el único que puede llevarnos
a una muerte feliz,
porque ni los poetas
consiguen esquivar a la muerte,
a pesar de que suele
enamorarse de ellos.
Oxwell L’bu Copyright © 2011

***Selfies con la luna***

***Selfies con la luna***
Luna, luna mi pasión
esta noche sube
como espuma
y la bruma de las
olas del mar parecen
acariciar una silueta de mujer.

Parece una diosa,
cintura frágil de mariposa,
piernas contorneadas,
caderas encantadas
y pechos firmes.

La vi tomándose selfies
a la luz de la luna,
la marea subía,
yo la miraba,
ella no me veía;
su belleza era como
una visión, de esas
que confunden la razón.

Se tomaba selfies y sonreía
no se para quién,
posaba para la cámara
segura que nadie la veía
y yo no sabía si irle a hablar
o contemplar su encanto.

Pero la luna celosa me delató,
ella detrás de una palmera
me descubrió y a pesar
de la noche noté que
se sonrojó.

Ella corrió, yo le grite que no,
pero en su prisa tropezó,
con una concha de mar,
yo me acerqué le quise ayudar,
ella me rechazó y no dejaba
de llorar.

Como pude cure su herida,
la consolé y admiré su belleza;
sentí de sus manos la tibieza,
me aguante las ganas de besarla
y para disimular, le señale a la luna.

Esta me vio de reojo, cómo
sabiendo mi intención,
yo sentía que se me salía
el corazón, mis ojos se
perdían en su belleza
y para mi sorpresa,
ella me sonrió.

Luego de eso no sé
lo qué pasó, pero nos
tomamos de las manos
y luego nos besamos.

Si ya sé, que suena a fantasía,
pero sin hacer alarde,
sino me creen pregúntenle
a la luna.
Oxwel L’bu copyrights 2018

***No me mires así mujer***

***No me mires así mujer***
No me veas de esa forma desafiante
y no me condenes por buscar
tu paraíso, si la vida quiso
ponerte frente a mí.

No me veas así mujer,
si me quiero perder
y en tus entrañas y viajar,
en tu via Lactea hasta que
mi esencia se encuentre
con tu sol.

No me veas así mujer
de esa forma condenatoria,
si mira que para mi tú eres
la gloria.

No me mires así mujer,
que quiero recorrerte entera,
así que prendamos el fuego
de la hoguera, hasta que arda
el deseo y se queme tu pudor.

Déjame demostrarte mi amor,
déjame embriagarme de tu cantor
hasta que sienta que me muero
haciéndote el amor.

Mujer que esto no es solo deseo,
es ternura, es entrega y sobre todo
ese deseo de dejar en ti, mi huella,
esa que no la borra el tiempo,
porque es flor de primavera.
Oxwell L’bu copyrights 2019