viernes, 17 de julio de 2020

Rumbo al mar de la eternidad...

Tuvo el amor entre sus manos,
lo siento correr como agua de manantial,
era tan eterno su caudal...
Pero quiso contenerlo y como flor
que se corta se fue secando entre
sus manos.

Ella decía que lo amaba,
pero su amor, era un amor 
sin renunciar, en el que todo
debería de girar en torno a ella;
un amor con seguridades y garantías.

Pero eso no es amor...
Porque la propia vida es un riesgo,
porque la vida es una aventura 
sin garantías, donde se decide vivir
con intensidad o se deja pasar,
pensando que vendrá otra oportunidad.

Hasta que llegó el día, en que 
sus arrogancias bajaron como la marea
y sus vientos impetuosos se calmaron
y lo buscó pero ya no lo encontró,
su manantial se fue rumbo al mar
de la eternidad...
Oxwell L’bu copyrights 2020

No hay comentarios:

Publicar un comentario