Si al llegar la navidad
tubieramos el espíritu dispuesto
y el corazón en conjunción
con el amor, todo adquirirá otro color...
Si al llegar la navidad tendieramos la mano, el extraño se transformaría en hermano y la indiferencia en bendita paciencia que nos llevaría a la mutua comprensión y el amor fraterno. Porque la navidad es un buen tiempo para volver a empezar y enderezar el camino. La navidad es mas que una estampa romántica o luces brillando, pues hay una luz que quiere brillar en tu interior que solo tú puedes permitirle que encienda.
Si en navidad el consumismo, no engendrara al egoísmo, el estrés no nos daría ese revés que desubica el verdadero sentido de la vida y deja el alma como barca a la deriva.
Si en navidad nos reencontraramos con nosotros mismos, si hiciéramos a un lado las envidias y egoísmos, es seguro que nos encontraríamos con quien le da la el verdadero sentido a la misma y en nuestro corazón le dejaríamos nacer.
Oxwell L'but copyright 2017
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