“Cosas mías…”

“Cosas mías…”

Cuando uno es adolescente 

demente, le basta ver a una mujer

para sentir una erreccion

y como se acelera el corazón.

Conforme se va creciendo,

uno va aprendiendo,

a controlar esas pasiones,

a anteponer las razones,

hasta que llega alguien

y rompe tus esquemas.

Y uno solito, se empieza

a enamorar y ha exagerar

motivos y razones por las

uno asegura que no se ha

equivocado.

Y se come el bocado,

ese que es una delicia al paladar,

pero al ingerirlo poco a poco,

te va destrozando las entrañas

y te deja en agonía sin 

permitirte cruzar el umbral

de la muerte.

Si, seguramente fueron

cosas mías, para que yo me 

enamorar así de ti,

porque tú nunca me lo pediste

pues nunca te importo.

No, tampoco voy a culpar

a mi imaginación, ni a esta 

pasión por vivir la vida así,

más bien ese amor siempre

lo agradecí.

Ahora no sé si fue por el exceso 

de pensar en ti,

no sé si fue esa luz que

me cegó y no me permitió,

ver a nadie más 

o simple y sencillamente

cosas mías…

Cosas mías, pues aunque

nunca te conocí, este amor 

lo conservo en una profunda

soledad.

Oxwell L’bu copyrights 2023

#cosasmias