En este mundo de obsolescencias prematuras… Sé que solo soy un punto en el universo, escribiendo versos mientras cae la tarde, que sin madera de poeta ni estrofas de canción voy escribiendo lo que me dicta el corazón, en medio de esta realidad virtual de mensajes instantáneos e imágenes fugaces, buscando un espacio para escribir al “Cortejo y Romance”.
Ella decía y repetía su nombre, cuando le llegaba el placer, cuando alcanzaba el orgasmo...Eso es una canción que toca las cuerdas del alma y hace una sinfonía, que se sublimisa en la entrega...