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jueves, 29 de diciembre de 2011

***Al Dar Las Doce***

***Al Dar Las Doce***
Seguimos contando el tiempo
como quien cuenta,
pérdidas y ganancias…
Sin percatarnos de que el,
... es quien nos consume.

En la mudanza de esos
cambios de fecha,
a la vida se le escapo
una flecha para indicarnos
el camino.

Pero nosotros seguimos
haciendo aproximaciones,
para tener nociones,
de que nos depara el futuro,
como que no bastara con
la faena diaria…

Por eso al dar las doce,
no como quien hace un inventario,
porque lo bueno que nos da
la vida no se puede almacenar
y mucho menos acaparar…

Invocare aquellos momentos,
que han dejado un sabor
dulce en mi boca…
Y como un loco que se ríe
solo los aplaudiré como
una foca.

Recordare a aquellos que ame
y sigo amando y que viven
en mis recuerdos…
Y que se, me estarán
esperando cuando de ese
brinco a la eternidad.

Daré gracias por ellos,
por ese espacio de tiempo
que el creador me permitió
compartir y vivir a su lado.

Me mirare al espejo,
y seré testigo de mi propia
evolución…
Agradeceré por las canas
y las marcas del tiempo sobre
mi piel que otros no alcanzaron.

Bendeciré a mis amigos
a cada uno por nombre,
evocare su presencia,
cuando me invada su
ausencia…

Con el corazón lleno
de gratitud y alegría,
elevare una oración,
por mi familia…
Porque ella sigue siendo
mi bastión y guarida.

Al dar las doce…
Tomare en consideración,
que voy en cuenta regresiva,
esto no para amargarme,
sino para vivir con intensidad

No me plantearé las típicas
“Resoluciones” de fin de año,
porque andar con dietas
me hace daño…
Y las metas me las planteo
a diario.

Brindare con champan si tengo…
Y sino con la misma felicidad,
lo hare con un vaso de agua.
Oxwell L’bu Copyright ©2011

Imagen: Internet

viernes, 31 de diciembre de 2010

***Resoluciones***

**Resoluciones***


Movidos por emociones
y por precepciones
de lo exterior…

Nos apropiamos de metas
que no son nuestras,
solo por agradar a los demás.

Para empezar contamos
con la “motivación”
que acaso nos alcance
para arrancar...

Nos lo proponemos,
que esta vez lo lograremos,
lo volvemos a intentar.

Cada inicio siempre es igual,
con un final tan predecible…
Porque nos es inconcebible
a nuestra propia conciencia escuchar.

Si nuestras resoluciones no
fueran el fruto de nuestras
emociones…

Estaríamos dispuestos
a pagar el precio…
Y nunca nos compararíamos
con los demás.

Amaríamos con toda el alma,
viviríamos a plenitud…
Comprenderíamos que no
hay mayor virtud que la
de ser nosotros mismos.

Comprenderíamos que
nuestras resoluciones
son solo vanas costumbres
cuando sin Fe decidimos
comenzar…


Oxwell L'bu
Foto: Internet